¿Habéis dormido alguna vez en una cabaña de madera en un árbol? Si no lo has hecho, quédate a disfrutar de este post que seguro que te encanta.
“Zuhaitz-etxeak” en euskera significa casa árbol, y de ahí el nombre de este alojamiento que se encuentra en Zeanuri, Bizkaia.
En nuestro caso, hemos tenido la oportunidad de disfrutar dos veces de dos experiencias únicas que a continuación os voy a contar:
La primera vez, fue hace unos cuantos años, que le regalé a mi pareja una noche en una cabaña en un árbol y no lo pudimos disfrutar más. Una noche única donde sentirás la naturaleza en sí misma, mientras los pájaros cantan y el viento sopla. También se puede disfrutar de un bonito atardecer y amanecer desde la cama, y es que las cabañas están situadas en un pequeño bosque con gran distancia entre ellas, por lo que además de tener intimidad, también sentirás esa soledad tan especial y única en pleno bosque. Además, por la mañana, el desayuno llega en una cestita y tienes que subirla a la cabaña a través de una cuerda. Un detalle ideal para disfrutar de un desayuno por todo lo alto. También hay posibilidad de encargar la cena, que nosotros también lo hicimos con la intención de disfrutar al máximo la cabaña. No me gustaría olvidar de mecionar, el servicio de SPA ecológico y privado que tienen. Cuentan con una bañera redonda de madera (calentada con leña a 38º) y una sauna finlandesa, una hora en la que pudimos disfrutar del anochecer en la bañera, con las estrellas en el cielo y el frio del invierno a fuera. No veáis el gusto de este momento.
La segunda vez que fuimos, en este caso, en lugar de alojarnos en una cabaña de árbol, tuvimos la oportunidad de alojarnos en los carros cíngaras, que por si no sabíais, es el medio de transporte más importante del pueblo gitano, muy conocido por su nomadismo. Por ello, este alojamiento es una invitación a viajar y a escapar.
Ambas experiencias son únicas, pero sin duda alguna me quedo con la sensación y la experiencia de dormir en la cabaña de un árbol, y que si no lo habéis hecho estáis tardando. Eso sí, os recomiendo reservarlo con mucho tiempo de antelación, ya que siempre suele estar lleno gracias al éxito del alojamiento.
Ahora que llegan las navidades, y necesitamos ideas, una noche en una cabaña de árbol es el regalo más original que podéis regalar, ¿por que hay algo más bonito que regalar tiempo?
Espero que os haya gustado este post y os haya servido para coger ideas para seguir disfrutando de experiencias tan únicas que nos ofrece la vida.
Un trocito de Nørden desde Bilbao,
(No veais lo raro que se me hace eso de “desde Bilbao”)
Laura